Si sos de las que aman perderse en mundos de fantasía, El Rithmatista de Brandon Sanderson es un libro que no podés dejar pasar. Pero hoy no te traigo una reseña tradicional: quiero invitarte a vivir la experiencia de El Rithmatista como si fuera un viaje literario lleno de magia.
Desde escenarios que podemos visitar en la vida real hasta reflexiones para un club de lectura, esta historia puede trasladarse a nuestra vida cotidiana y llenarla de inspiración.
Porque leer es también una forma de viajar, de visitar mundos sin moverte de tu sitio de lectura favorito.
La Academia Armedius: de la ficción a las universidades reales
Uno de los escenarios más atrapantes de El Rithmatista es la Academia Armedius, donde los estudiantes aprenden la Rithmática, junto con las materias muggles. Con sus pasillos antiguos y esa atmósfera solemne, enseguida podés sentirte dentro de un colegio lleno de magia y misterio.
Si te gustan los viajes literarios, podés encontrar esa misma vibra en universidades históricas como Oxford o Cambridge, con su aire clásico y académico. Pasear entre columnas o entrar a una biblioteca antigua puede ser lo más parecido a recorrer Armedius en carne propia.
Universidad de Cambridge. Foto de Google Fotos, del usuario ‘sufee mohammad’
Los duelos de tiza: magia en lo cotidiano
En esta novela de fantasía juvenil, los rithmatistas libran batallas dibujando círculos protectores y criaturas con tiza en el suelo. Una mezcla de estrategia, geometría y pura imaginación.
Aquí nos recuerda a nuestras clases de matematica en el colegio, donde veíamos esas figuras geométricas y teníamos que calcular área y superficie y nos preguntábamos para qué aprendíamos eso, cuándo más lo volveríamos a usar en la vida.
Finalmente tenemos la respuesta: para leer, entender y disfrutar de esta lectura llena de ingenio. Para introducir magia a tu vida de la mano de los números.
¿Dónde lo podés vivir en tu día a día? En tu journaling. Cuando te sientas de bajo humor, cuando sientas que hay un dementor en tu vida y tus propios demonios te quieran arrastrar, podés dibujar estos círculos de protección o jaulas donde los encierres. Para saber que están, pero sin que te hagan daño. Vos los controlás a ellos, no al revés.
Los Territorios: paisajes reales que parecen de fantasía
El peligro en el libro viene de los Territorios, lugares misteriosos donde los rithmatistas enfrentan criaturas de tiza. Particularmente se menciona mucho la guerra en Nebrask. Aunque el mapa está basado en los Estados Unidos, siguen siguendo lugares ficticios, como si fuera un universo paralelo. Y si querés darte una idea de cómo se ven estos lugares, podés ver los siguientes:
Los acantilados de Irlanda, donde el mar y el viento crean escenarios de película.
Los desiertos de Utah, tierra natal de Sanderson, con paisajes áridos que parecen otro planeta.
En Argentina, la Quebrada de Humahuaca y sus cerros multicolores transmiten esa misma sensación de otro mundo.
Hablar de El Rithmatista es también hablar de su autor. Brandon Sanderson, uno de los nombres más grandes de la fantasía actual, es conocido por crear sistemas mágicos con reglas claras y lógicas. En este libro, la magia nace de la geometría y de la disciplina, como si fuera un arte que cualquiera de nosotras podría aprender con práctica y pasión.
Esto lo hace especial: nos recuerda que lo imposible puede volverse real si lo imaginamos con suficiente detalle.
De hecho, últimamente estoy anotando esta frase en mi journaling: “YO CREO MI REALIDAD.”
Joel y Melody: amistad, contrastes y crecimiento
Más allá de la magia y los duelos de tiza, lo que hace especial a El Rithmatista son sus personajes. La relación entre Joel, un chico fascinado por la Rithmática aunque no sea rithmatista, y Melody, una estudiante con un talento real pero poca confianza en sí misma, le da a la historia un corazón entrañable.
Joel nos da ganas de obsesionarnos por algo con tan ardor que no te importa quedarte a las noches trabajando e investigando sobre ello. ¿Cuándo fue la última vez que te obsesionaste por algo de esa forma? Me recuerda también a la serie Gambito de Dama, a la obsesión que ella tenía por el ajedrez.
Y Melody nos muestra esa parte vulnerable nuestra, esa parte que necesita validación externa. Que es completamente normal, pero podés sorprenderte cómo la magia empieza a fluir a tu vida cuando te soltás, cuando te dejás llevar, cuando confiás.
En una buena historia nunca puede faltar el amor. Y aquí vemos cómo empieza a nacer este amor juvenil entre Joel y Melody, que primero es una amistad que nos enseña que no tenemos por qué resolver todo solas. Siempre en equipo todo funciona mejor. Tus amistades son un gran regalo de la Vida.
Muchas veces la magia real está en los lazos humanos: en encontrar a alguien que nos complemente, nos desafíe y nos anime a ser mejores.
Fan art de Joel y Melody. Foto de Pinterest
Preguntas para un club de lectura
Si estás buscando compartir la experiencia de El Rithmatista en un club de lectura, podés empezar con estas preguntas:
¿Qué figura geométrica elegirías como tu círculo de defensa?
Si pudieras dar vida a un tizoide, ¿qué crearías?
¿Qué lugar real se parece más, para vos, a la Academia Armedius?
¿Cuál es tu personaje preferido y por qué?
Son disparadores que transforman la reseña en conversación y nos ayudan a conectar más profundamente con la historia.
El Rithmatista: un viaje literario lleno de magia
Esta reseña de El Rithmatista busca más que contarte la trama: es una invitación a que lo vivas como una experiencia. Brandon Sanderson nos recuerda que la fantasía juvenil no es solo evasión, sino también una forma de descubrir lo extraordinario en lo cotidiano. Sí, aunque tengamos más de treinta años. La magia no tiene edad.
Si todavía no le diste una oportunidad a este libro, te aseguro que vale la pena: te va a regalar un viaje literario distinto, lleno de inspiración y con la promesa de que hasta una simple tiza puede encender la imaginación.
El Rithmatista, Brandon Sanderson. Imagen de Goodreads
En este blog quiero que hablemos de mentalidad del escritor también. Porque hay mil cursos, videos y blogs en el éter que te enseñan cómo escribir. Aquí quiero que vayamos un paso más, que confiemos primero en nosotros mismos y en nuestra escritura y que aprendamos cómo ganar dinero con nuestra pasión por los libros.
Y todo empieza por la mentalidad. Porque si vos no creés en vos mismo, nadie lo va a hacer. Si vos no creés en que sos escritor, nadie lo va a hacer y van a seguir yendo a vos con “ah, ¿y de verdad de qué trabajás?” o la tan conocida “eso no te da de comer. Buscate algo en serio.”
¿Se te rompe el corazón? A mí también.
Y ya lo dice el biólogo celular Bruce Lipton en su libro La biología de la creencia, no porque unos genes nos vengan de fábrica significa que debemos regir nuestra vida en base a ellos y a lo que nos dicen quienes vinieron antes que nosotros.
Podemos modificar nuestros genes. Podemos activarlos o no. Tenemos el poder. Pero todo gira en torno a nuestras creencias y al entorno que le damos a esos genes.
Creer en tu escritura como base para tu carrera de escritor
“Al igual que en las células aisladas, el carácter de nuestra existencia se ve determinado no por nuestros genes, sino por nuestra respuesta a las señales ambientales que impulsan la vida.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Si nuestra respuesta a todas las cosas horribles que nos dicen desde que somos chicos sobre vivir de nuestra escritura o vivir de nuestro amor por los libros es afirmativa, es la creencia inconsciente de que todo eso es verdad, entonces va a ser muy difícil que como adultos podamos hacer nuestros sueños realidad.
¿Por qué? Porque nuestra mente se cree todo lo que le dicen. Absorbe todo. Está en nosotros reeducarla. Está en nosotros decir “no, esto no es verdad. Yo puedo vivir de mi pasión.”
Creer en vos mismo, en tu escritura y en que es posible es la base para tu carrera de escritor, es la base para vivir de tu pasión por los libros.
Conocerte para recuperar tu pasión
“El conocimiento es poder y, en consecuencia, el conocimiento de uno mismo supone una mayor capacidad de actuación.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Suena cliché y una fiaca, lo sé. Pero si no te conocés a vos mismo, es difícil que des rienda suelta a la pasión que está en tu corazón.
Cuando escribís o leés libros, ¿lo hacés porque de verdad llama tu atención o porque es lo que deberías estar escribiendo o leyendo?
A ver, no está mal que leas o escribas lo que hoy está en el mercado, porque de eso se trata si queremos ser best-sellers. Pero hay muchos libros y géneros que pueden llevarte a eso. Olvidate del hype en las redes sociales y buscá lo que dice tu corazón.
Ya lo dice también María Martínez en una entrevista. Su escritura empezó a fluir cuando empezó a escuchar a su corazón. Lo mismo lo dijo J. K. Rowling, que ella escribe para divertirse a sí misma. Si vos no la pasás bien, eso se nota en tu trabajo.
¿Qué es lo que de verdad te dice tu corazón?
Tu alma tiene la clave para vivir de tu pasión por los libros.
“Estamos hechos a imagen y semejanza de Dios y es necesario que volvamos a introducir el espíritu en la ecuación si queremos mejorar nuestra salud mental y física.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Tu alma es tu esencia. Tu alma tiene la clave para que puedas vivir de tu pasión por los libros. ¿Cuánto de verdad la escuchás? ¿Cuánto de verdad entrás en conexión con ella? ¿Cuántas veces en realidad entrás en conexión con Dios y el universo para que tu alma tenga paz y calma?
Muchos escritores y lectores no creen en nada. Pero el arte es la expresión del alma, es la expresión del Gran Creador en nosotros. Esta expresión podemos verla tanto en El Camino del Artista como en Libera tu Magia, dos libros súper necesarios en nuestra vida artística, y más si estás en un bloqueo creativo.
Yo tengo una frase en el escritorio que dice: “escribir me acerca a Dios”, que es lo mismo que decir “escribir me acerca a mi alma; escribir es lo que me hace conectar con Dios y el universo y, por ende, con mi propósito de vida.”
Escribir es un acto espiritual y solo cuando entendamos esto es que de verdad nuestra creatividad empieza a fluir de manera natural. No existen los bloqueos porque nuestra alma sabe qué quiere decir, qué tiene para comunicar a otras almas.
Pensar en positivo para vivir de tu pasión por los libros
“Los pensamientos positivos tienen un intenso efecto sobre el comportamiento y los genes, pero solo cuando estamos en armonía con la programación subconsciente. De igual modo, los pensamientos negativos tienen también un poderoso efecto.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Esto va en sintonía con lo que decíamos antes y la confianza, la creencia en tu escritura. Si, como nos pasa a muchos, tenemos en nuestra mente el “esto no es productivo, estás perdiendo el tiempo” cuando nos sentamos a escribir o leer, entonces es muy difícil que todo fluya. Es difícil que la vida fluya así.
Tus creencias limitantes están en tu subconsciente, esas creencias con las que nos machacaron de chicos y que hoy la sociedad sigue perpetuando. Está en vos creer de verdad en que todo eso es mentira, en que existe otra realidad posible, en que de verdad podés vivir de tu pasión por los libros.
Y, sobre todo, que no está reservado para unos pocos que tienen suerte. No dejes que te roben esa esperanza. Bruce Lipton también habla de esto: “Los problemáticos casos de efecto nocebo sugirieren que los terapeutas, los padres y los profesores pueden robarte la esperanza haciéndote creer que no puedes hacer nada.”
Pero vos sí podés. Podés hacer todo lo que quieras. Todo es posible. Creelo, pero creelo de verdad, que tus huesos se impregnen con este pensamiento, con esta ideología. Y vas a ver cómo los cambios empiezan a darse, siempre y cuando hagas cosas desde el corazón, desde tu alma, desde lo que de verdad te apasiona. Es el único lugar desde donde se puede crear algo verdadero.
Orientar tu energía para escribir
“Fue más difícil deshacerme de los extenuantes pensamientos derrotistas que por lo general me rondaban la cabeza. Los pensamientos consumen energía.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Somos energía. Eso está más que científicamente comprobado. Somos energía y también somos el promedio de las cinco personas con las que más nos rodeamos. Sue energía nos afecta. Su energía nos moldea. Su energía afecta a nuestro subconsciente, tanto como lo hacen nuestros pensamientos.
Los pensamientos consumen gran cantidad de energía. ¿Nunca te sentiste completamente extenuado aún cuando supuestamente no hiciste nada? Esos son tus pensamientos afectando tus sentamientos y, por ende, tu energía física.
Si te dejás vencer por los pensamientos derrotistas y por la toxicidad de tu entorno, a menos que vuelques toda esa frustración en tu escritura y la saques de tu sistema, entonces es muy difícil que tu creatividad pueda fluir con libertad, porque tenés barreras energéticas súper fuertes.
En esos casos, cuando te sientas muy derrotado, buscá actividades y personas que vibren tan lindo que te suban toda esa energía. Recuerdo una vez que salía con alguien y, luego de ver a esa persona, volvía a mi casa súper recargada de energía, con ganas de hacer mil cosas.
Rodeate de gente y situaciones que vibren en esa energía que necesitás para dar rienda suelta a tu alma, que te recarguen, no que te absorban.
Ochenta por ciento interior, veinte por ciento exterior.
“Esas partes de la mente en apariencia ‘separadas’, la parte consciente y la parte subconsciente, son independientes. En lo que se refiere a la capacidad de procesamiento neuronal, la mente subconsciente es millones de veces más poderosa que la consciente. Si los deseos de esta entran en conflicto con la programación del subconsciente, ¿cuál crees que ganará?”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
No basta con que te repitas “soy un escritor brillante y prolífico” si en verdad no lo creés. La mente consciente puede pensar en positivo, pero tu subconsciente tiene que acompañar. Tu subconsciente solo es una máquina que repite señales que ya tiene programadas.
Son esas señales las que tenés que modificar para poder empezar a brillar, para poder ser ese escritor que querés ser, para considerar de verdad a tu pasión por los libros como un método perfectamente capaz de generarte ingresos.
Y es lo que más cuesta. Por eso en este blog quiero que hablemos también de mentalidad, que repogramemos juntos el subconsciente, para que no se te dispare ese miedo cada vez que te sentás a escribir o leer o esa voz negativa diciendo que estás perdiendo el tiempo; para que te atrevas a vivir tus sueños.
Bruce Lipton pone este ejemplo: si de niño aprendiste a poner tapa al dentífrico y te encuentras el dentífrico destapado, tus cables se cruzarán y te enojarás sin saber exactamente por qué.
Mi trigger es la música de los vecinos. Me transforma completamente y es como si mi vida tuviera que ponerse en pausa mientras la energía negativa me invade por todos los poros de mi piel. Hablando con mi papá, me dijo que esto es herencia de mi mamá, que ella reaccionaba con la misma aversión y enojo con el que reacciono yo.
¿Ves? Es algo heredado. No es mío. Y ahora que soy consciente de ello, es hora de reprogramar a mi subconsciente. Y esto es aplicable a todas las creencias, a todas las ideas que aprendimos y/o “heredamos” del entorno.
Derribar la creencia de las circunstancias
“Creo que el mayor problema al que nos enfrentamos es que pensamos que nuestras vidas funcionan con los deseos, motivaciones y aspiraciones creadas por nuestra mente consciente. Cuando luchamos por nuestras metas o fallamos a la hora de conseguirlas, generalmente legamos a la conclusión de que somos víctimas de fuerzas externas que nos impiden llegar a nuestro destino.”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Levante la mano el que piensa que no es exitoso porque vive en América Latina y aquí no hay mercado ni posibilidades de vivir de los libros.
Levante la mano el que piensa que los males vienen porque en su familia le dijeron siempre que algo no se puede.
Te veo haciéndolo, como también me vi haciéndolo. Y dejame decirte que hasta un cierto punto hasta aquí tal vez estuviste en lo cierto, pero solo porque son esas creencias las que frenaron tu subconsciente. Pero ahora es tu responsabilidad derribar la creencia de que las circunstancias afectan tu vida.
Es hora de, como dicen por ahí, ser el protagonista de tu vida y no la víctima. Y eso se logra cambiando tu interior. Como es adentro, es afuera. SER-HACER-TENER. Ahí está la clave. Empezá a ser para que tus circunstancias cambien. No esperes a tener para ser.
Vivir desde el amor a la escritura
“Puedes vivir una vida de miedo o una vida de amor. ¡Tienes elección!”
Bruce Lipton – La biología de la creencia
Tenemos la posibilidad de elegir el amor o elegir el miedo, elegir el amor a la escritura y a tus sueños o el miedo a que se cumplan todas las creencias que están en tu subconsciente desde tu infancia.
Tenés todo a tu disposición para vivir la vida que querés contar. Si te quedás con el “es muy difícil vivir de escribir” o “nadie valora a los autores que no son influencers”, entonces te vas a perder en esa espiral de miedo y desesperación, de odio hacia el mundo editorial.
En su lugar, preguntate qué podés hacer vos para tomar las riendas de tu vida creativa y transformar eso en tu profesión. ¿Qué podés hacer diferente para vivir la vida de tus sueños, para vivir de tu pasión por los libros? Poné a tu mente a trabajar para tener tu respuesta en lugar de seguir en un círculo vicioso negativo.
Me parece que la clave está en lo que dice Bruce Lipton aquí. Leelo por favor con atención: “Tus creencias actúan como los filtros de una cámara, cambiando la forma en la que ves el mundo. Y tu biología se adapta a esas creencias. Cuando reconozcamos de una vez por todas que nuestras creencias son así de poderosas, estaremos en posesión de la llave a la libertad.”
Otras frases útiles de La biología de la creencia para dar vida a tu alma creativa
“Muchos de nosotros ponemos límites a nuestras vidas no porque sea necesario hacerlo, sino porque creemos que debemos hacerlo.”
Ejemplo de uso de la energía: “los aborígenes australianos pueden percibir dónde está el agua enterrada bajo la arena y los chamanes amazónicos pueden comunicarse con las energías de sus plantas medicinales.”
“Nuestra mente subconsciente es la encargada de tomar nuestras decisiones todos los días.”
“Nuestras vidas son esencialmente una copia impresa de nuestro subconsciente, comportamientos que fueron adquiridos fundamentalmente de los demás (nuestros padres, familia y entorno) antes de cumplir la edad de seis años. Como reconocen los psicólogos, la mayoría de estos condicionantes en nuestro desarrollo son limitantes y discapacitantes.”
“Las creencias sí controlan la biología. Tenemos la capacidad de evaluar de forma consciente nuestras respuestas a los estímulos medioambientales y de cambiar antiguas reacciones siempre que lo deseemos.”
“La función de la mente es crear coherencia entre nuestras creencias y la realidad que experimentamos. Eso explica por qué mi salud y mi energía remontaron el vuelo en cuanto me deshice de esa perspectiva del mundo «deprimida y fatalista».”
“Nos han programado culturalmente para creer que solo cuando alcancemos nuestras metas seremos felices. Sin embargo, la fórmula para la felicidad es realmente la inversa: la felicidad promueve el éxito, y no al revés. Para decirlo en pocas palabras: el éxito no trae la felicidad; la felicidad trae consigo el éxito.”
“Tus creencias tienen más poder que tu realidad.”
“Si somos capaces de controlar nuestros miedos, podremos recuperar el control de nuestras vidas.”
Creer en tu escritura
Aquí fue solo un pequeño pantallazo de cómo afectan nuestras creencias a nuestra biología celular. Pero te recomiendo leer este libro en su totalidad para ver cómo la Epigenética y la Física Cuántica pueden hacer magia en nuestra vida.
Y al final este blog se trata también un poco de eso: de lograr sueños, de ver la magia en “la vida real”.
